Como mis (escasísimos) asiduos lectores bien saben, desde agosto entro a trabajar a las siete de la mañana y eso representa un horror cotidiano. Siempre he odiado despertarme y sostengo con vehemencia que las clases de siete de la mañana deberían estar prohibidas por la CNDH. Mis alumnitos se salen de la cama para estar a las siete de la mañana sentaditos en su lugar pero definitvamente no despiertan hasta después de las siete y media en el mejor de los casos. Las clases que doy a las siete son un auténtico monólogo lo cual resulta absolutamente incompatible con la orden de callarme recibida de un frustrado jefe hace un par de semanas.
Pero ya me desvié, lo que quería contar era un bonito episodio de la semana pasada, justo a tiempo para librar el cambio de horario, que me hizo darme cuenta de todo lo que me puedo perder levantándome a la hora que acostumbraba hasta el verano.
Una de las cosas que más me gusta de la ubicación de la universidad y la prepa es la extraordinaria vista de los volcanes en los días claros de invierno. Un día de la semana pasada iba llegando a la zona de la prepa justo cuando empezaba a clarear y alcancé a ver cómo la luna llena se metía entre el Popo y el Izta nevados. No encuentro cómo expresarlo sin recurrir a lugares comunes o cursilerías así que lo dejo a la imaginación de mis lectores.
las cosas enfermizas se clasifican en simpáticamente enfermizas o artes y antipáticamente enfermizas o vicios
lunes, 27 de octubre de 2008
martes, 21 de octubre de 2008
ante la estupidez
Dice Espido Freire en En donde siempre es octubre: "Esto es la vejez, la gente se está volviendo estúpida y a mí comienza a darme igual". Pero hoy estoy en una postura diferente, la gente se está volviendo estúpida, me parece clarísimo y eso realmente me preocupa. Nadie entiende nada y no se entera de que no está entendiendo nada (qué tal, cinco negaciones en una sóla oración...). ¿Qué se hace con eso? Hay días que me da igual, hoy no es uno de esos días
viernes, 17 de octubre de 2008
pobrecitos de mis alumnitos
primero hay que leer esto:
Sugar makes you sweeter
y después hay que saber que tengo diagnósticada intolerancia a la glucosa y no como casi nada de azúcar desde hace prácticamente diez años.
Ahora imagínense cómo sufren mis alumnos
Sugar makes you sweeter
y después hay que saber que tengo diagnósticada intolerancia a la glucosa y no como casi nada de azúcar desde hace prácticamente diez años.
Ahora imagínense cómo sufren mis alumnos
viernes, 10 de octubre de 2008
el barroquismo adolescente
los adolescentes son barrocos por naturaleza
son incapaces de apreciar la belleza que representa la simplicidad y tienen un estética excesiva y abigarrada:
se visten con muchos letreros, muchos colores y muchos accesorios
sus trabajos escritos tienen imágenes, letras de todos los tipos, tamaños y colores
tienen también un terrible horroris vacui: todo ha de estar decorado y saturado.
su pánico al vacío se manifiesta también en su absoluta incapacidad de estar en silencio... lo tienen que llenar a toda costa con gritos; con música mala, fuerte y aturdidora; o con lo que haga falta.
son incapaces de apreciar la belleza que representa la simplicidad y tienen un estética excesiva y abigarrada:
se visten con muchos letreros, muchos colores y muchos accesorios
sus trabajos escritos tienen imágenes, letras de todos los tipos, tamaños y colores
tienen también un terrible horroris vacui: todo ha de estar decorado y saturado.
su pánico al vacío se manifiesta también en su absoluta incapacidad de estar en silencio... lo tienen que llenar a toda costa con gritos; con música mala, fuerte y aturdidora; o con lo que haga falta.
lunes, 6 de octubre de 2008
hoy me faltan palabras
o por lo menos me falta una...
cada día soy más pocha (que descubro con sorpresa es una palabra que está en el diccionario) pero a veces es inevitable
mi estatus actual es disengaged, de manera total y absoluta. Estoy emocionalmente disengaged por primera vez en prácticamente tres años. Y como que no me gusta... no es una cuestión de soledad, los que me conocen saben bien que no va por ahí, es más bien una cuestión de ocupación -empleo tanto de tiempo como es espacio- o más bien de desocupación.
Siempre he valorado la paz y la tranquilidad, pero esto es excesivo
cada día soy más pocha (que descubro con sorpresa es una palabra que está en el diccionario) pero a veces es inevitable
mi estatus actual es disengaged, de manera total y absoluta. Estoy emocionalmente disengaged por primera vez en prácticamente tres años. Y como que no me gusta... no es una cuestión de soledad, los que me conocen saben bien que no va por ahí, es más bien una cuestión de ocupación -empleo tanto de tiempo como es espacio- o más bien de desocupación.
Siempre he valorado la paz y la tranquilidad, pero esto es excesivo
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