lunes, 18 de octubre de 2010

vértigo

me parece que cuando las aguas se agitan no tiene sentido engarrotarse, es evidente que así no se llega más que al fondo. las alternativas viables son nadar plácidamente de muertito o sumarse al movimiento, dejarse llevar por la convulsión.

sé que vienen cambios y he decidido aligerar mi carga. tras dedicar varios días a poner orden a mi entorno, creo que hoy el orden se me incluye también a mí. este fin de semana de limpieza profunda fue al mismo tiempo un profundo intento por generar armonía y sí, en cierta medida, también un ejercicio de purificación.

lo confieso, me emocionan los cambios, que las cosas evolucionen, que las fuerzas se reacomoden y eso es lo que está pasando. por un lado, algunos empiezan a descubrir lo obvio mientras siguen evadiendo lo que tienen que enfrentar tarde o temprano; por otro, algunos luchamos contra la evasión y realizamos pequeños actos que suponen un enorme valor. andamos.

miércoles, 13 de octubre de 2010

anonimato

hoy di un paso fundamental para reducir el nivel de anonimato de este espacio: decidí publicar su dirección en mi perfil de twitter. este cambio obedece a una serie de transiciones graduales y más o menos silenciosas. espero poder detallarlas más adelante pero a muy grandes rasgos puedo señalar tres factores principales: 1. la madurez tiene que ver, necesariamente, con hacerse cargo de lo que se dice y el anonimato de este blog nunca ha querido ser un escudo de irresponsabilidad. 2. entiendo que en 2010 nuestra personalidad virtual debe estar integrada y armonizar con nuestra personalidad real y, poco a poco, iré integrando mis espacios. 3. mi compulsión de privacidad empieza a moderarse, este hecho es un resultado claro del efecto catalizador que ha tenido en mí la prepa.

jueves, 30 de septiembre de 2010

ideologías


lo he visto una y otra vez y me asusta. el ciclo en general puede resumirse de la siguiente manera:

una persona de buena voluntad, un día, en palabras de kant, despierta del sueño dogmático. se lanza con toda honestidad a buscar la verdad. eventualmente, la encuentra -a la verdad o algo que se le parece-. celebra haberla encontrado y la asume plenamente. súbitamente, se erige promotor y defensor de esa verdad. muy pronto, la defensa de esa verdad en la que cree honestamente lo conduce a descalificar a quienes no pueden ver la verdad que ha descubierto. el siguiente paso natural, y al parecer inevitable, es perder de vista la posiblidad de la existencia de otras verdades. al final se cae en un nuevo dogmatismo, probablemente más virulento que el primero, en el que esta persona de buena voluntad es literalmente incapaz de reconocer e incluso de ver la buena voluntad en otros.

¿es este ciclo la única opción para quien busca la verdad? ¿es posible que una persona esté comprometida con una causa y logre un nivel aceptable de apertura y objetividad? ¿tomar postura conduce siempre al dogmatismo, la descalificación y la intolerancia?

creo en la importancia de tomar postura. también quiero creer que la apertura no implica siempre tibieza, que la posibilidad de escuchar y reconocer diversas verdades no supone falta de compromiso. pero hay días en que no estar segura, que no poder afirmarlo con certeza, me da miedo.

sé que lo más probable es que esto lo esté escribiendo desde mi propio dogmatismo y que hay muchas realidades allá afuera que no sólo no entiendo sino en realidad ni siquiera veo.

si el mundo y el ser humano realmente funcionan así ¿qué esperanza hay de un mundo en que el diálogo y la paz sean la norma?

martes, 28 de septiembre de 2010

ni un paso atrás


esto es un pequeño manifiesto y también una confesión

manifiesto que estoy convencida del rumbo al que estoy conduciendo muchas de mis acciones. creo firmemente que, si éste no es el camino, el anterior, el obvio, lo es aún menos. declaro que a pesar de las presiones, los miedos y los bandazos sostendré las convicciones y la decisiones que éstas originaron. señalo que no tengo muy claro a dónde me llevará esta convicción pero pienso seguir este camino a donde quiera que me lleve.

confieso que esta nueva situación me molesta y me preocupa pero también me emociona. confieso e informo que últimamente traigo la mecha corta y el mal carácter que según yo escondía hábilmente ante casi todos, brota a la menor provocación: grito, vocifero, me acelero y no tengo el menor interés de "dominarme" como le llama mi papá

repito: ni un paso atrás
y si lo dan yo aquí me quedo, o de plano me voy
no digan que no avisé
yo así no juego

está todo clarísimo ¿no?

miércoles, 8 de septiembre de 2010

versito

mi abuelo, orgulloso de su linaje de poetas románticos veracruzanos, componía versos en sus ratos de ocio. mi madre heredó esa habilidad pero a mí sólo me llegó la obsesión con la sonoridad del lenguaje hablado. eso, o resulté mucho más snob que ellos y nunca me he permitido siquiera intentarlo. los versos de mi abuelo son ligeros y también excelente muestra de su sentido del humor. me gusta particularmente aquél de:
si la faz en ira o calma
del espíritu es el eco
¿cómo ha de tener el alma
quien tiene el hocico chueco?
dedicado a un ex-presidente (adivinen cuál) famoso por su boca torcida.

hoy me encantaría hacer un poemita similar para indicar una de las principales certezas del día: si la escritura es un reflejo de la organización mental, y una escritura ordenada y clara es síntoma de un pensamiento ordenado y claro ¿qué pasa con las ideas de las personas que son incapaces de escribir (o expresar por cualquier otro medio) de manera ordenada y clara?

el versito acabaría diciendo algo así como:

¿cómo ha de tener el coco
quien tiene los verbos chuecos?

y sí, tristemente, ese tipo de personas amenazan con ser mayoría. no sé si me preocupa o me asusta.

martes, 7 de septiembre de 2010

mi fin en cifras

por eso dejé de planear por adelantado mis fines de semana, porque nada suele salir como lo espero, y esto no siempre es malo.

el viernes estaba tan cansada que lo único que planeaba era pasar el fin de semana encerrada en mi casa recuperando energía para la compleja semana que me esperaba. todo resultó al revés, maravillosamente al revés.
  • horas totales de trabajo en el fin de semana 2.5
  • comidas en casa 1
  • alcohol consumido: casi una botella de vino, 5 cervezas
  • pláticas casuales con viejos conocidos 1
  • horas de conversación intensa con viejos o muy viejos amigos 18
  • reuniones familiares del tipo muy agradable 2
  • excelentes noticias ratificadas 1
  • planes de viajes futuros fijados 2
y a pesar de la gripa, el cansancio, el dolor de dedo, el frío y la lluvia, el fin de semana fue excelente

jueves, 2 de septiembre de 2010

mi dedito

lo admito, es de lo único que hablo y últimamente parece que también es de lo único que tuiteo así que por qué no bloguear al respecto también. tengo el dedo chiquito del pie derecho roto, me lo rompí desde el lunes en la noche pero hasta hoy a medio día supe a ciencia cierta que estaba fracturado.

como tengo genes de la familia de mi madre, no es fácil que se me rompan los huesos. es más, a pesar de golpes y las caídas que me caracterizan durante largos periodos de mi vida, ésta es la primera vez que se me fractura algo que no sea el tabique e incluso el tabique sólo se me ha roto 2 veces (que para estándares de esta familia es poquísimo).

ahora resulta que tengo una pequeña factura en una falange y las consecuencias me tienen asombrada. ya me duele poco, puedo caminar con bastante normalidad pero estoy permanentemente agotada y con unas ojeras de horror. estoy desarrollando la hipótesis de que las fracturas desgastan o al menos que esta fractura me desgasta. quizás se deba a que estoy durmiendo menos bien que de costumbre por miedo a lastimarme en alguno de los movimientos bruscos tan comunes en mí; o quizás a que mi organismo está gastando una gran cantidad de energía en soldar el huesito y mantenerme alerta para evitar que me vuelva a lastimar.

lo que sí tengo claro es que esta ha sido una semana larga y agotadora (aunque también, y a pesar de todo, ha sido una semana excelente).

lunes, 30 de agosto de 2010

advertencias periodísticas

Hoy, con esa maravilla que se llama stumbleupon (gracias, A., por la recomendación) llegué a esta página. Me encantó la idea de poder ponerle advertencias a algunas de las noticias que se publican en este país. ¿Se imaginan si, antes de leer una noticia, nos encontramos una etiqueta con una leyenda que previene al lector sobre el contenido o el contexto de lo que está a punto de leer?

Además de las propuestas por Tom Scott (me gusta particularmente ésa de ADVERTENCIA: El periodista no entiende el tema del que habla) propongo algunas más tropicalizadas:

ADVERTENCIA
Zona de chayotes

ADVERTENCIA
El autor de esta nota ha cambiado de postura política más veces que Muñoz Ledo

ADVERTENCIA
No olvide que el que esté publicado no significa que está bien escrito

ADVERTENCIA
Esta nota contiene datos descontextualizados y apreciaciones subjetivas

ADVERTENCIA
Esto no es realmente una noticia, en realidad es una anuncio pagado (Peña Nieto 2012)

ADVERTENCIA
En este medio la objetividad y el rigor son mal vistos

ADVERTENCIA
El autor de esta nota no fue a la primaria el día que enseñaron las reglas de acentuación

ADVERTENCIA
La fuente de primera mano del autor son los rumores de twitter

ADVERTENCIA
El autor de esta nota escribe indistintamente (y con el mismo estilo) en las secciones de política, sociales y espectáculos

ADVERTENCIA
No podemos garantizar que lo que está a punto de leer pueda considerarse español

ADVERTENCIA
La verdadera fuente de los datos estadísticos es la pregunta del día de Pedro Ferriz

¿Cuál otra sugieren?

domingo, 29 de agosto de 2010

contra el caos

siempre es emocionante constatar como, a pesar de mi persistente sensación en sentido contrario, la vida cambia, mucho, todo el tiempo. el fin de semana fue de pequeñas celebraciones por grandes cambios que se vieron acompañadas de la firme decisión de revisar el rumbo.

es muy cómodo quedarme sentada en medio de este cada día más caótico cuarto y quejarme porque pasan cosas en la vida de todos y nunca en la mía. hoy caí en el cuenta que a veces la vida irrumpe hasta en un cuarto caótico, sacude desde dentro y obliga a tomar decisiones.

la primera decisión tiene que ver con acabar con este caos de una vez por todas. ojalá pudiera decir que voy a acabar con el caos para siempre, pero sé muy bien que es un fantasma que del que no puedo librarme y que muchas más veces perderé batallas contra él. simplemente quiero recordarle que aunque su triunfo haya durado tanto no es definitivo. a partir de este momento vuelve el principio de orden a mi vida, a mi espacio, a mis ideas y ni la humedad, ni el deterioro en el azul intenso, ni el moho en los rincones podrán preservar el caos.

hoy, como parte de mi celebración privada de los grandes cambios en la vida, haré que se vaya el caos, que empiece a retroceder. pero esto no significa que todo se quedará como está. sé que me estaba acostumbrando al caos, que me estoy acomodando y que la comodidad no me hace bien. necesito soltarme, necesito saltar, necesito vértigo. y el primer paso es sentirme más ligera, libre de este caos que me detiene.

jueves, 26 de agosto de 2010

algunos placeres sencillos

a veces, me gusta creer que soy una persona sofisticada de opiniones complejas y gustos cosmopolitas. y sí, quizás lo sea en algunos casos, pero tengo que reconocer que en realidad soy amante de los placeres sencillos: de las tardes de café, lluvia y música; de los días enteros de lectura; de los tres minutos que puedo arrancarle carcajadas a un niño de casi dos años; de las largas conversaciones con unos pocos amigos y en grupos pequeños.

me encantan los chicharitos así, sólo con un poco de sal; los huevos rancheros (a los que denomino, con un guiño bien consciente, desayuno de campeones, pocas cosas me hacen más feliz que una quesadillas con salsa de chipotle. el agua mineral, de tehuacán, no las ridiculeces ésas de agua traída del otro lado del mundo; la cerveza oscura democráticamente en su botella.

adoro el viento, el eco, el aire limpio; pero también las carreteras, el ruido, la vida de las ciudades.
¿qué hace que lo sencillo resulte tan atractivo? no puedo ni quiero contestar en general, simplemente diré por qué me gusta tanto: porque no me cansa, no me produce sobresaltos, no me genera. me provoca una sensación de familiaridad, de pertenencia, de identificación.

las cosas simples me hacen bajar la guardia y sentarme en el suelo, de chinito, a ver la vida pasar.

domingo, 22 de agosto de 2010

sin título y sin moraleja

como no quiero caer en clichés simplemente voy a relatar dos episodios del rato que estuve jugando con mis sobrinos D. que tiene cinco años y M. que está a punto de cumplir tres. ya ustedes sacarán sus propias conclusiones moralejas e interpretaciones o no.

primero, estaba D. con su abuelo (mi tío) platicando sobre trucos de magia. El abuelo insistía en que la magia no existe, que todos son trucos que se tienen que hacer con cuidado para engañar al público, que quien los hace se tiene que mover con agilidad y que para poder hacer creer a la gente que está pasando algo distinto es muy importante que quien hace el truco no esté demasiado cerca de quienes lo están viendo. entre los muchos trucos que improvisaba el abuelo para entretener a D. y que luego le explicaba detalladamente, hizo uno en el que simulaba pasar una tarjeta de la memoria con la que habíamos estado jugando de una mano a la otra. D. es un niño extraordinariamente listo que entiende las cosas muy fácilmente pero para sorpresa del abuelo y la mía, se negaba a ver lo que tenía enfrente a pesar de que se lo explicamos tres veces. con brillo en los ojos sostenía que la carta atravesaba la mesa de madera del desayunador para llegar a la otra mano.

después, la abuela decidió adelantarle a M. su regalo de tres años (su cumpleaños es en quince días pero D. y M. viven en querétaro y sus abuelos en veracruz y no estarán juntos en el cumpleaños). M. emocionada y saltando en la silla, sacó de la bolsa algo envuelto en papel de china amarillo. era un pants rosa intenso que, con toda claridad no le hizo demasiada ilusión (sé que a la mayor parte de los niños no les encanta que les regalen ropa aunque siempre hemos habido excepciones). tras pararse muy derechita en lo que la abuela revisaba que fuera de la talla adecuada, alargó la mano hacia la bolsa de regalo y al ver algo más en el fondo, una enorme sonrisa apareció de pronto. Gritó "chicles" y con una emoción increíble dejó a un lado el pants y sacó un paquete de trident splash de menta. mi tía me había anticipado que eso ocurriría pero lo que no estaba esperando es que M. hiciera recordara todas las lecciones que ha recibido sobre la importancia de ser agradecido. en un ataque de claridad M. volteó hacia su abuela y le dijo "me gusta el traje pero también me gustan los chicles, gracias" y con una enorme sonrisa dejó la ropa tirada y se metió el primer chicle del paquete a la boca.

martes, 17 de agosto de 2010

amigos, ciclos, ritmos

esta es una mera constatación, lo tengo claro hace mucho pero no deja de llamarme la atención cómo la gente va y viene en nuestra vida. Piensen en las personas más cercanas a ustedes hace cinco años ¿en dónde están en este momento? ¿ha cambiado el nivel de cercanía?

es un hecho, muchas veces el solo cariño resulta insuficiente para conservar a alguien cerca. hace tiempo dije que, definitivamente, se requiere fuerza de voluntad. hoy no estoy segura de que la fuerza de voluntad sea garantía. la vida es mucho más compleja, la amistad tiene que ver con cercanías, voluntades, cariños, ciclos, desplazamientos, ritmos, interferencias.

el sábado cené con varios amigos, entre ellos uno que era, probablemente, una de las personas más cercanas a mí hace nueve o diez años. sé que el cariño sigue ahí, al menos de mi parte, pero hoy vamos a ritmos muy distintos. en algún momento me dejé arrastrar por la nostalgia e hice un esfuerzo consciente por tratar de encontrar el vínculo fuerte que tuvimos pero nada, fue como topar con pared una y otra vez. fue una extraña búsqueda por redescubrir el click, por encontrar lo que fue, por rescatar lo que sabía bien, no podría volver a ser.

y sí, lo confieso, me dio mucha tristeza.

lunes, 16 de agosto de 2010

las oportunidades

"cómo, cuándo y por qué, son demasiadas preguntas para hacerle al destino..."

ayer descubrí que las oportunidades de calamaro es mi canción del recién terminado verano



nunca deja de asombrarme ese poder que tiene la [buena] música (y el [buen] cine, y la [buena] literatura) para un día, así sin más, adquirir un significado compeltamente nuevo. es como si entraran en consonancia contigo, con tu contexto y lo que hasta entonces había sido una estrofa que cantabas sin pensar adquiere categoría emblemática y se convierte en un himno de batalla o un contenedor de frustraciones. por eso tengo propósitos, por eso releo, por eso hay películas que no me canso de ver.

a propósito del aniversario

hoy hace un año que se casó mi hermana. por un lado siento que la boda fue ayer y por otro la siento lejanísima. sé que ya he hablado del punto, pero cada nueva fecha significativa provoca en mí la misma sensación. tengo, en este momento de mi vida, una relación paradójica con el tiempo y su paso. tengo 33 y me sigo sintiendo jovencísima, pero por otro lado, ya estoy tan acostumbrada a que el tiempo pase, que ya no me extraña nada que pase tan rápido.

un año es poquísimo tiempo y recuerdo ese día con absoluta claridad, desde la desmañanada, las carreras para estar listas y la crisis de maquillaje de mi madre hasta la llegada de regreso a la casa de madrugada, en calidad de zombie y con la camioneta mucho más llena de lo que hubiera esperado. por otro lado, tanto ha pasado y tanto ha cambiado en este tiempo que siento la fecha lejanísima.

hace mucho que tengo muy claro que mientras mayores somos el tiempo pasa más rápido, pero con toda sinceridad no sé si esta percepción contradictoria también es resultado de la edad o es más bien una manifestación de mi conflictiva relación personal con el tiempo.

sábado, 14 de agosto de 2010

no quedan días de verano dice amaral

creo que es momento de declarar el verano 2010 oficialmente terminado. sé bien que en el calendario todavía le queda más de un mes pero mi calendario es distinto. en realidad mi verano empieza por ahí de mi cumpleaños y termina al empezar el semestre de otoño. durante muchos años tuve casi todo el verano de vacaciones (sí, los tres mesesotes, era delicioso) y ahora, cada vez tengo menos.

este año el clima pasó de calor intenso e inusual a lluvias intensas e inusuales. para mí ha sido sin duda una temporada intensa e inusal; incluyó un cumpleaños con compañía escasa y peculiar, una fuerte crisis postcumpleaños, dos viajes increíbles, problemas de salud en los J. de mi familia, un crush que duró como seis días, varias graduaciones, una contingencia pluvial en mi cuarto, muchas horas de familia, una dosis considerable de malas noticias, una cantidad abrumadora de trabajo y casi nada de descanso.

me encantaría poder presentar aquí un informe detallado y reflexivo de todo lo que he cambiado este verano pero no puedo. necesito un par de semanas y tres o cuatro pláticas para poder empezar a aventurar un recuento. de lo único que estoy segura es que termino el verano mucho más cansada que cuando lo empecé, y que ahora uso lentes.

viernes, 13 de agosto de 2010

enojo

los vecinos tienen fiesta y su escandalo me molesta. sé que no debería quejarme, casi todos mis vecinos son mis parientes y (con un par de notables excepciones) son más bien del tipo no desmadroso. eso de tener fiestas nocturnas que me molesten es muy poco común. pero tengo que reconocer que hoy me molestan muchas cosas.
estoy muy enojada, llevo toda la semana entre la espada y la pared y no me gusta. tampoco me gusta que me usen de munición en pleitos que no tienen nada que ver conmigo y en los que me rehuso a tomar partido. el enojo se combina con la frustración y el cansancio para generar un nivel de agresividad muy poco común en mí. mi hábito de disentir discreta y moderadamente ha dejado lugar a una beligerancia que me ha sorprendido hasta a mí. tengo clarísimo que me encanta mi trabajo pero esta semana me han quitado demasiado el tiempo las actividades que son propiamente mi trabajo y lo mío está completamente abandonado

jueves, 12 de agosto de 2010

¡llegué!

alguien me dijo esta semana que el jet lag es lo que te pasa cuando tu cuerpo viaja más rápido que tu espíritu (prometo checar la referencia precisa y publicarla pronto). definitivamente, eso me pasó esta semana.

el regreso el domingo fue muy rápido y el día me pareció eterno. el lunes fui a trabajar pero no estaba del todo aquí y a mi desubicación y cansancio (no creo haber dormido más de 4 horas en promedio en los diez días anteriores y antes de eso dormí mal por la preocupación de mi papá) se sumó el susto de mi ojo. anoche dormí muy bien, hoy amanecí con mucha energía y por fin sentí que ya estoy aquí. justo a tiempo para empezar semestre el lunes.

miércoles, 11 de agosto de 2010

una de salud ocular

con el objetivo de ahorrarle al nutridísimo grupo de lectores de este blog un susto como el que tuve entre ayer y hoy en la mañana, quiero aprovechar esta reaparición para informarles que es perfectamente posible volverse miope de un día para otro, tal cual. va la historia completa:

como mucho de ustedes saben, estuve toda la semana pasada en toronto en un congreso. el martes, mientras oía la maravillosa plática de carl bereiter, me di cuenta que mi ojo izquierdo estaba como en huelga y se negaba a enfocar. de entrada no me asusté mucho pues ya alguna vez había tenido alguna crisis de pereza ocular que desaparecía al cabo de dos o tres días. traté no pensar demasiado en el tema pero cada vez que me tapaba el ojo derecho o lo cerraba veía que más bien no veía. el lunes que volví al trabajo el ojo empezó a molestar más. no puedo decir que me doliera porque nunca (o casi nunca) llegó a tanto, simplemente lo empecé a sentir. generalmente, sabemos que tenemos ojos y que están ahí y que de ellos vienen la imágenes que vemos pero no los sentimos. pues yo puedo sentir claramente mi ojo izquierdo, por lo menos desde el lunes si no es que desde antes.

ayer en la mañana caí en la cuenta que mi huelga ocular izquierdista cumplía ya una semana y que no parecía tener intención de ceder en algún momento y empecé a inventarme historias. primero, me convencí de que cada vez veía menos y después, se me ocurrió la posibilidad de que el daño fuera no sólo progresivo sino también irreversible. decidí que no quería quedarme ciega, no he escrito nada relevante como para pasar a engrosar la selecta lista de grandes escritores que se han quedado ciegos. creo que mi caso ni para el club bartleby da. me preocupó pensar en la posibilidad de no poder usar Q10 para escribir las entradas de mi blog y ya me veía a mí misma aprendiendo braille.

mientras yo tenía todas estas ideas lúcidas y coherentes, mi papás estaban moviendo cielo, mar y tierra para localizar al ocupadísimo oftalmólogo que atiende a la familia desde hace muchos años. al final no me pudo recibir él pero sí su asistente. la conclusión es lo que ya anuncié desde el principio de este texto: tenía una miopía latente que se manifestó de forma repentina. Y precisamente por lo repentino del caso me di cuenta, y a mi pobre ojo le está costando mucho trabajo adaptarse a la nueva realidad. lo más vergonzoso de la historia es que mi terrible ceguera y la enorme urgencia médica que me hizo salirme de la prepa en horas laborales dejando todo abandonado y pasar muchas horas de paranoia no era más que -1.00 de esférico y -0.50 de cilíndrico.

Sí, soy un poco escandalosa

viernes, 30 de julio de 2010

lo bueno es que estoy de vacaciones

hoy fue un día larguísimo, pero no quiero acostarme sin escribir un par de cosas.

el día no sólo fue largo sino de una increíble intensidad emocional. creo que pasé por todos los estados emocionales que van de la profunda alegría a la profunda preocupación pasando por el llanto empático. reafirmé que ante las emergencias soy bastante hands on. vi a través de los ojos de mi papá lo bonito que es sentirse querido. descubrí una cara, un gesto particular que pone mi hermano cuando está contando algo chistosísimo y quiere estimular a la gente a seguirse riendo ante lo que aparenta ser un titubeo, es algo así como el artista esperando el aplauso, y de que lo merece no tengo la menor duda. recordé la plática con mis amigas de la prepa el sábado: nadie nos preparó para el momento que nuestros papás serían frágiles, creíamos que nuestros papás eran fuertes e invencibles. redimensioné la fuerza de mi madre, es increíble como crece ante la adversidad.

martes, 27 de julio de 2010

un manual de urbanidad y buenas costumbres por entregas

¿quién demonios fue manuel antonio carreño y qué le pasaba por la cabeza? no me contesten que un "músico, pedagogo y diplomático venezolano" porque ya lo busqué en wikipedia, lo que busco es una comprensión más profunda.

mi hermano acaba de descubrir que entre los libros desalojados por la contingencia en mi cuarto y reubicados en el albergue temporal hay una copia del compendio del manual de carreño que no tengo muy claro cómo llegó hasta ahí, supongo que venía entre los viejos libros de ortografía que empecé a acumular cuando daba clases de redacción en la universidad. el libro es una maravilla y nos ha brindado horas y horas de diversión. mi madre hizo un esfuerzo legítimo por defender el manual y criticar nuestra irreverencia pero la desarmé cuando le leí que es de muy mala educación hablar rápido y con volumen elevado. sé que en el fondo concuerda conmigo en que un libro en el que las palabras más usadas son mesura y circunspección no puede ser bueno.

valoro mucho la delicadeza y la consideración y siempre he dicho que son fundamentales en la educación de una persona, pocas cosas hay que sean más irritantes que el gandallismo y la patanería. sé que que sin algunas normas de educación y respeto la convivencia social sería imposible, pero de ahí a escribir por entregas un larguísimo manual en el que se hacen recomendaciones que van más allá de la manera correcta de saludar o de comer para incluir observaciones y juicios sobre las diferencias fundamentales entre hombres y mujeres, la manera de limpiar la casa, escribir cartas, cortarse las uñas o dormir, hay una distancia que me parece hoy insalvable.

realmente creo que la urbanidad debe ser una manera de hacernos la vida más fácil y placentera a todos, no una larga lista de reglas inverosímiles que solo sirvan para acartonarnos y aumentar nuestras angustias ¿o no?

domingo, 25 de julio de 2010

sobre mi incompatibilidad con las listas

No soy buena para las clasificaciones y aún menos para los conteos o las listas. Sé que hay personas (tengo una muy cerca) que pueden enumerar, priorizar y categorizar sin problema; yo, no.

Me es muy fácil discriminar lo que me gusta de lo que no. Sé muy bien qué me gusta, qué me encanta, qué me fascina y qué odio. Creo que ésas son las cuatro categorías (al menos son más que las dos de mi madre: lo más bonito del mundo y la vomitada de borracho, no existen intermedios). Sólo no me pidan ordenarlos ¿mis cinco películas favoritas? me declaro incapaz de identificarlas. ¿Qué autor o qué género musical me gusta más? No lo sé.

Esto se complica con el extraño funcionamiento de mi memoria: tengo una memoria excelente para acontecimientos y personas; pero para el cine, la música y los libros no. No puedo recordar el título de los libros que he leído y menos el argumento. ¿Cómo voy a poder enumerar en un momento determinado mis 10 películas favoritas si no las recuerdo todas, si la última que vi (inception, una maravilla) llena a tal punto mi cerebro que no puedo pensar en muchas otras. Además, con la fluidez propia de los recuerdos, las cosas me gustan más un día que el siguiente y no es cuestión de volubilidad sino de contextualización -explicar esto merece otro post y lo escribiré pronto-.

jueves, 22 de julio de 2010

fittipaldiana

Mi papá es una de las personas más inteligentes que conozco y tiene usa serie de teorías sobre el mundo y la vida bastante peculiares y gran parte de ellas bastante atinadas. Una de ellas es que manejar es una actividad importantísima y que la mejor edad para aprender a manejar es antes de la adolescencia -entre los 11 y los 13-. Si alguien llega a los 16, saca su primera licencia y lleva por lo menos tres años de saber manejar, mi papá asegura que no cometerá gran parte de las imprudencias que suelen cometer los adolescentes por lucirse: si sabe manejar y hace mucho que lo hace no tiene necesidad de demostrárselo a nadie. Esta teoría funcionó bastante bien con mis hermanos y conmigo: nunca hemos tenido un accidente grave y resultamos conductores prudentes y responsables.

En mi caso, manejar es también una de las cosas que más disfruto. Y cuando digo manejar me refiero a mucho más que ir de mi casa a la prepa y de regreso cada día. Me gustan los días como hoy que manejo de Puebla al D.F., llego sin titubear a un lugar en el que no había estado nunca antes, regreso a la carretera por otro camino y vuelvo a mi casa, todo en menos de seis horas. Me gusta bajarme del coche en un rush de adrenalina, llena de energía y completamente alerta. Jugar a "el que duda pierde" es, sin duda, mi deporte extremo favorito.

Una de las preconcepciones sexistas más firmemente arraigadas en nuestra cultura tiene tres axiomas fundamentales:
1. las mujeres manejan mal;
2. las mujeres no manejan en carretera y
3. las mujeres no se saben estacionar.
Me encanta demostrarme a mí misma continuamente que esta realidad, a la que alguna vez llamaron ley natural, no es más que una construcción cultural. Manejo muy bien, me encanta manejar en carretera y mi capacidad de estacionarme puede competir con la de cualquier hombre.

martes, 20 de julio de 2010

las focas de bergai

Tengo una tía madrileña famosa por hacer regalos inverosímiles (sí, estoy hablando de la que me dio los calcetines azul kriptonita). De los muchos regalos que me ha dado, uno de los que más me gusta es un libro de la poeta española Carmen Martín Gaite que se llama Visión de Nueva York.

Hace mucho que tengo una verdadera fascinación por los libros de poesía, de esos que el libro mismo es un objeto maravilloso. Este libro es uno de los mejores ejemplos que conozco de este hecho, con la salvedad de que no es, en modo alguno un libro de poesía: es una edición facsimilar de un cuaderno de collages que la autora hizo durante su estancia en Nueva York a finales de 1980.

Es un libro de poesía y mucho más, es un recordatorio de que se puede encontrar belleza en el periódico del domingo o los anuncios de las ofertas. De que a veces las palabras no son suficientes y de que, en fondo, todos los días necesitamos poesía.



Dice Carmen Martín Gaite: "Yo, cuando la inventé, no sabía que en la isla de Bergai habría focas"

lunes, 19 de julio de 2010

de caos y goteras

Lo he dicho muchas veces, el estado de orden o desorden de mis cosas es una excelente señal del estado de orden o desorden de mi interior. No es ningún secreto que mi cuarto no ha estado realmente ordenado en muchos meses (mucho más de doce) y que es un buen reflejo del caos interno que no para desde mi periodo de wedding planner.

El mes pasado, tras mi viaje a San Franciso, me forcé a mí misma a empezar a poner un poco de orden, lo cual en realidad significa mucho más que un poco. Fui a comprar cajas, cajitas, cajotas y un zapatero nuevo y me metí a fondo a arreglar parte de este caos.

Todo iba muy bien hasta las lluvias de hace diez días. El viernes 9 me despertó el sonido de una gotera sobre mi escritorio, rápidamente lo moví, saqué la impresora y puse un bote de basura para evitar que se siguiera mojando el piso. Realmente a las cinco y media de la mañana no hay mucho más que hacer. Cuando me iba, me di cuenta que justo abajo de mi pequeña gotera, en el comedor, estaba cayendo muchísima agua.

Ese día tuve un bonito curso del que prefiero no acordarme y no volví a mi casa hasta las ocho de la noche. Durante la mañana le hablé a mi madre para que revisara que el resto de mi cuarto estuviera bien y la pobre estaba vuelta loca con el desastre del comedor así que no puso demasiada atención. En la noche cuando regresé mi mamá me aseguró que había revisado la repisa de hasta arriba y mis libros estaban secos. No contábamos con que toda el agua que estaba cayendo abajo se estaba filtrando por algún lado, más específicamente por dos de las tres paredes que cargan los entrepaños de uno de mis libreros. Unos cuantos libros estaban muy mojados y muchos libros estaban por lo menos húmedos. Vacié el librero y puse todos los libros en un lugar en que les da bastante sol, quité los entrepaños, moví todo el otro librero y, en resumen, volví a hacer de mi cuarto un gran desorden. Y como es un hecho universalmente conocido, caos genera caos y no he podido volver a poner siquiera un poco de orden.

Esto es una buena metáfora para mi situación interna, mis pequeños intentos por darle orden a mi caos se han visto contrarrestados por una serie de fuerzas externas que me tienen completamente revuelta. Estoy de vacaciones y suelo aprovechar las vacaciones para descansar y ordenar un poco (lo interno y lo externo) pero estoy durmiendo mal y estoy desesperada por hacer cosas (no tengo claro cuáles además del reto). Si no hago nada siento que estoy perdiendo el tiempo y no tengo la suficiente fuerza de voluntad para empezar algo. Quiero salir a la calle y una vez que estoy fuera lo único que quiero hacer es volver a mi cuarto. Tengo claro que es momento de enfrentar realmente el diseño de mi plan B y nada más de pensarlo se me retuerce la tripa y me congelo.

Bonitas vacaciones.

domingo, 18 de julio de 2010

la tarde del jueves

El jueves comí con D. y C.(¿o A? con tantas ya no sé) y después fuimos a tomar fotos. Yo no lo tenía previsto pero con ellos estoy acostumbrada a fluir y dejarme sorprender, así que los acompañé al famosísimo güindous, un paraje atrás de Chipilo al que le pusieron ese nombre por razones que saltan a la vista. Mis dos amigos tienen cámara profesional y empezaron en seguida a tomar fotos. Yo, casi sin darme cuenta, saqué mi teléfono y empecé a disparar yo también. Esas tardes las disfruto tanto que me dan ganas de empezar mi alcancía para una cámara decente.

Quiero aclarar que 1. no soy buena fotógrafa 2. mi cámara es mi bb. A pesar de lo anterior, la tarde y el lugar permitieron que salieran algunas fotos que me gustaron y que quiero compartirles:










sábado, 17 de julio de 2010

me explico

¿por qué otro reto? ¿por qué ahora?

porque está probado que, al menos entre los participantes, es la única manera de asegurar un poco de asiduidad. un blog requiere disciplina y como, al parecer, estamos atravesando todos una etapa de poca autodisciplina creo que la existencia del reto nos obligará a retomar nuestros blogs.

sin duda tiene que ver con la soledad, es fuerte decirlo pero así es, los autores de los seis blogs participantes vivimos en cuatro ciudades distintas y, los que estamos más de uno en la misma ciudad, también nos vemos bastante poco. la intimidad del blog es una muy buena manera de saber qué está pasando con cada uno de nosotros y de acompañarnos. leerlos y que me lean es una manera de estar cerca, en particular en una época en que necesito la cercanía.

ahora que lo pienso, también es una manera de asumir que este blog es cada día menos anónimo, hoy muchas personas saben que yo soy felisbertiana y es un gran reto seguir escribiendo con honestidad ante tantas personas, ese frágil equilibrio entre privacidad y apertura resulta cada día más complicado pero también cada día más interesante.

pero al final se trata de que definitivamente quiero hacer esto, quiero escribir.

jueves, 15 de julio de 2010

prevacacional desesperado

días como hoy no puedo evitar que mi cerebro es una entidad distinta y toma decisiones propias. mañana es mi último día de trabajo pero mi cerebro se declaró oficialmente de vacaciones desde ayer. hoy pasé el día haciendo esfuerzos para tratar de concentrarme y nada, no hubo manera de hacerlo reaccionar.

me divierte mucho notar estos desfaces: mi voluntad sabe que tengo que trabajar hasta mañana a las tres de la tarde, mi cuerpo no hace sino pedir vacaciones y mi cerebro decidió bajar la cortina. espero que mañana logre integrarlos a todos para hacer que el día resulte menos frustrante. no sé qué se logre pero ya se los contaré

miércoles, 14 de julio de 2010

el retroceso de martín romaña o recuento parte uno

Sumándome a la época de recuentos y evaluaciones, tan naturales al terminar ciclos, he decidido hacer un recuento de cómo he crecido en estos tres años en la prepa.

El primer cambio que me parece evidente tiene que ver con lo que, a falta de un sustantivo más adecuado (y porque me niego a considerarme asertiva, odio esa palabra), llamaré aplomo. Mi problema no suele ser no saber qué quiero, de hecho soy bastante decidida y una vez que logro ponerle nombre a las cosas, sé que no hay manera de hacerme tonta. Mi problema durante mucho tiempo fue mi incapacidad patológica para decir claramente qué quiero. Esto parece paradógico, pero mi ya famoso complejo Martín Romaña lo explica muy bien.

Martín Romaña es el protagonista de los Cuadernos de navegación desde un sillón Voltaire de Bryce (que incluyen La vida exagerada de Martín Romaña y El hombre que hablaba de Octavia de Cádiz). Una de las principales características de su personalidad es un miedo patológico a dar molestias que lo lleva continuamente a situaciones límite por no haber expresado a tiempo lo que quería o lo que necesitaba. Mi complejo Martín Romaña es mi propio miedo patológico a dar molestias que me ha llevado también a situaciones extremas que, afortunadamente, suelen ser un poco menos disparatadas.

Pues bien, mi Martín Romañismo me ha llevado a que la mayor parte de mi vida haya esperado que otros tomaran las decisiones. Esto ha cambiado radicalmente en los últimos tres años. Ahora, cuando sé lo que quiero suelo decirlo con claridad y cuando veo que nadie está tomando la iniciativa la tomo yo, proponiendo o decidiendo según sea el caso. A veces trato de frenarme porque parte de mi siente que mis decisiones suelen ser autoritarias, pero otra parte de mí sabe que es necesario que alguien decida y que, en general, no está mal que ese alguien sea yo.

martes, 13 de julio de 2010

Reto bloguero, de nuevo

Va el segundo intento del año, a ver si esta vez tenemos un poco más de suerte (o resultamos un poco más constantes). Tengo muy claro que disfruté la época de blogueo diario a finales del año pasado y que disfruté aún más las semanas de blogueo constante de varios así que he decidido convocar a darle una segunda oportunidad al reto bloguero.

Las reglas las estableceré yo porque creo que es más rápido, sin embargo están sujetas a discusiones y ajustes dentro de un periodo razonable. A partir de hoy quedan 24.4 semanas para fin de año y creo que un promedio de dos entradas a la semana parece factible así que propongo lo siguiente: escribir, a partir de hoy, 50 entradas antes de fin de año. Reestableceré el contador en este blog y trataré de mantenerlo actualizado y quizás haya algún tipo de premio (o contrapremio o "consecuencia" como le decimos ahora a lo que toda la vida ha sido llamado castigo) pero no he decidido de manera definitiva.

Nada más para asegurar que todos estamos en el mismo canal declaro que no consideraré válidas las entradas que tengan menos de tres renglones de material original ESCRITO. Esto significa que no basta con subir alguna foto, anexar un video o citar algo.

¿Como ven? ¿listos?

miércoles, 2 de junio de 2010

hoy sí fue demasiado

¿Recuerdan aquella vez que ponché dos llantas de coches diferentes en una semana? Pues ahora dejé las luces encendidas en coches diferentes dos veces en tres días y las dos veces se bajó la batería lo suficiente para necesitar que me pasaran corriente.

Cuando las ponchaduras podría justificarme de muchos modos, hay baches que no se ven de madrugada y la segunda sigo sosteniendo que no sé ni cómo pasó, de hecho sigue siendo posible echarle la culpa a mi cuñado por haberse metido a algún bache de regreso de Chapulco. Pero esta vez no puedo echarle la culpa a nadie más que a mí: Fui yo quien dejó las luces de dos coches distintos encendidas durante 9 horas dos veces en tres días; fui yo quien esta mañana cuando encendió la luz pensó ¡no la vaya a dejar encendida de nuevo, sería un desastre! Sí, fui yo quien hizo el desastre. Me merezco por lo menos el premio a la idiotez de la semana, y no digo del mes porque en mi defensa lo único que puedo argumentar es que no fueron en el mismo mes (aunque hayan sido antier y hoy)

Estoy escribiendo esto mientras espero que llegue mi papá a rescatarme, por mucho que venga en vocho un empujón no fue suficiente para arrancarlo hoy.

martes, 18 de mayo de 2010

una verdad universal


este muchachito lebedev sí que es listo... miren qué verdad universal: la pirámide de lebedev

sábado, 15 de mayo de 2010

esta semana (o ¡ven, claridad, llega ya!)

Esta semana ha sido una completa montaña rusa emocional. He tenido momentos de claridad y momentos de confusión y extrañamiento alternándose sin cesar. Recordé claramente por qué decidí ser profesora (porque lo decidí, eso lo tengo clarísimo) y caí de golpe en la cuenta que el plan b necesita atención; me sentí orgullosa de ser parte de un equipo y luego la vida decidió restregarme en la cara sus enormes limitaciones; pude ver con claridad cuántas personas importantes hay en mi vida y me sentí profundamente sola; revisté antiguas historias mientras que otras parecen acosarme; me sentí poderosa y me aplastó la impotencia; fui y vine de la desolación a la consolación.

Necesito tiempo para asimilar todo.

lunes, 10 de mayo de 2010

treinta y tres

1. crisis de vejez pre-cumpleaños (check)
2. varios días de pequeñas celebraciones (check)
3. otro cumpleaños sin un muy alto porcentaje de las personas más importantes de mi vida (check)
4. periodo de lucidez pesimista postcumpleaños (check)
5. larga lista de propósitos cumpleañeriles rota (check)

pues como ven, mi cumpleaños fue completamente típico
felices 33 a mí

martes, 27 de abril de 2010

para ambientar mi próximo cumpleaños, otra de vejez

no sé explicar las cosas sin recurrir a ejemplos y no se me ocurre una fuente de ejemplos en la que me sienta cómoda que mis propios recuerdos ¿qué voy a conocer mejor que mi propia vida? es por eso que suelo echar mano de anécdotas propias para clarificar los conceptos. esto invariablemente conduce a que mis alumnos se rían de mí pero quiero creer que también ayuda a humanizarme.

hoy, entre ejemplo y ejemplo, hube de recomendarles que si se quedan en la universidad (están a un mes de terminar la prepa) y tienen la oportunidad de tomar clases con el famosísimo panchito campoamor, el mejor maestro de literatura que tuve en la carrera, no dejen de hacerlo. a lo que un alumno contestó con sincera espontaneidad:

-¿y qué, ese wey sigue vivo?

no pude evitar el sarcasmo:

-no, les estoy recomendando que tomen clase con un fantasma. Ah, y además, como terminé la carrera hace 50 años todos mis profesores tienen que estar muertos.

el grupo se carcajeó entre incómodo y asombrado y yo no pude evitar agregar.

-bastante conflicto tengo ya con mis casi 33 para que además me hagan sentir vieja tan gacho.

lunes, 26 de abril de 2010

agobio y lucidez

hoy me atacó un agobio que se convirtió en una absoluta negatividad. cuanta razón tiene bryce cuando dice que la lucidez es pesimista: la lucidez fue la otra característica central de mi día.

soy incapaz de hacer todo lo que se espera de mí (y en el fondo nadie espera que lo haga todo pues es evidente que estoy rebasada)

hicimos un repaso al organigrama y salió que ya no soy ubicua, chale, con lo bien que se sentía eso (ahora estoy nomás en dos lugares y ya ¡qué aburrido!)

o pido ayuda pronto o tendré que pedir esquina, no puede ser más claro.

mucho de lo que estamos haciendo necesita replantearse de fondo, la alternativa es resignamos a creer que las generaciones son cada día más estúpidas y, por lo tanto, que el mundo estará cada día peor.

¿por qué justo en los momentos de mayor carga de trabajo me asaltan estas ideas que consumirán muchísimas horas coco? ¿por qué cuando tengo que calificar y calificar dedico tantas horas a un cambio próximo en felisbertiana?

domingo, 25 de abril de 2010

estoy de vuelta, una vez más

Abrí este blog como regalo de 30 años que me hice yo a mí misa, el blog está por cumplir 3 años y yo 33 y se acercan cambios.

Por el momento con esta entrada retomo la intención de no tener este espacio tan abandonado y aviso que se me viene difícil. Ya estoy tendiendo en demasía al guorcajolismo y esta semana tengo que calificar y calificar y calificar. Además, tras la difícil prueba laboral que surgió el viernes tendré la tentación de desvivirme y dejar de delegar. Espero que no sea así.

domingo, 7 de marzo de 2010

mi color dorado

Hace mucho que sostengo que el deseo adolescente expresado reiteradamente en los máximos ataques de efusividad amistosa de mis tiempos "nunca cambies" es bastante equivalente a una mentada de madre. Se me ocurren pocas cosas más terribles que quedarse atrapado en los catorce con ideas, sueños, valores y sentimientos de los catorce. Creo que es maravilloso que nuestros gustos y criterios estéticos también evolucionen. Afortunadamente, ya superé mi época de Niel Diamond, los Back Street Boys (así, sin ninguna sigla o abreviatura) y la de los éxitos del Rock'n'Roll. Afortunadamente, el color dorado es el menos gastado de mi caja de colores. La primera parte se explica sola, quiero profundizar en la segunda.

Es un hecho sabido por todo el que me conozca que las artes plásticas no son lo mío pero hubo un periodo en mi vida en que no lo tenía tan claro. Un periodo en el que la mayor felicidad era sentarme con mi cuaderno scribe de dibujo (de ésos que tienen una hoja de cartulina y una de papel de china) y la caja de 48 prismacolor de mi mamá y dibujar princesas. Así es, dibujaba princesas con cinturita de avispa y enormes y redondas faldas siempre con las manos atrás (al menos de esa limitación sí era consciente) y en medio de lo que, desde mi estética infantil, eran lujosos salones de baile. Sería fácil creer que el color más usado en mis dibujos era el rosa pero no, casi todo era plateado o dorado por lo que gasté los lapices de esos dos colores.

Hoy descubro con emoción que, además de haber llegado a aceptar mi nula capacidad para las artes plásticas he llegado a revalorar mi uso de los colores y, orgullosamente, el lápiz dorado está justo como nuevo.

sábado, 6 de marzo de 2010

únete a los optimistas

Qué horror, este blog corre el peligro de convertirse en una oda a la vida y un chubasco de optimismo pero asumo que no puede ser de otro modo. Sigo de buen humor y todo me parece lindo.

Mis rasgos de perfeccionismo son escasos y eso me parece muy bien. Es emocionante que todo salga justo como lo esperamos a la primera, pero me encanta también cuando los cosas no resultan exactamente como las tenía planeadas. Hoy fue un día así, no fue perfecto pero si fue agradable e interesante. Quedaron retos muy concretos y de dimensiones radicalmente diferentes por afrontar, ya se verá qué sale.

jueves, 4 de marzo de 2010

preprimaveral

Hoy fue un día maravilloso, tal como deben ser los días de invierno: soleados y con un cielo perfectamente azul.
También fue un día en qu la evasión y el sentido de posibilidad me mantuvieron de un buen humor insuperable.

Me encantan los días tan buenos, creo que se acerca la primavera

miércoles, 3 de marzo de 2010

reaparición

Sé que este blog está nuevamente abandonado, es una clara señal del caos y exceso de trabajo que caracteriza mi vida en este momento. Tengo que admitir oficialmente que soy workahólica, qué horror, nunca creí llegar a este punto.

Por otro lado tengo que avisar que, como ya lo he dicho, ordeno el universo a mi alrededor ,sólo que en este momento también estoy teniendo efectos adversos en la tecnología, en las últimas 24 horas:

  • Mi lap se empezó a negar a abrir archivos adjuntos de office, los baja y abre en blanco
  • Mi compu de la oficina se atontó, me mandó a una pantalla asustante y se volvió muy lenta
  • Una base de datos de la prepa, que estaba siendo usada activamente se corrompió y sigo esperando a que me digan si tiene remedio o no (esto me tuvo al borde de un colapso nervioso dos horas ayer)
  • A mi BB se le descargó súbitamente toda la batería en la noche y hoy en la mañana se negaba a encender

Hoy me tengo miedo a mí misma, manténganme alejada de aparatos electrónicos.

miércoles, 17 de febrero de 2010

absurdos

Hay mucha gente que cree que la educación es un gran negocio. Temo desilusionarlos, la educación es desgastante siempre, satisfactoria a veces pero no es (o al menos me empecino en creerlo) una mera operación mercantil. Poner una escuela puede ser un buen negocio, no lo niego, pero definitivamente es mucho más que un negocio. El problema es que hay mucha gente que o no lo entiende o es completamente cínica.

No quiero entrar en detalles de intenciones y finalidades, sólo quiero hablar de dos elementos que resultan absolutamente evidentes: el nombre y la imagen. Todos sabemos que poner nombre es algo bastante complejo, pero para algunos parece ser una barrera infranqueable. Todos hemos visto escuelitas y escuelotas, jardines de niños y "universidades" con nombres completamente increíbles que van de lo pretencioso a lo simplemente sublime. Mis favoritos personales son el Instituto Panecléctico de Puebla y la Escuela Minimalista de Ciencias Penales. Me encanta también la historia que cuenta G. sobre los incautos que querían ponerle Iván Illich a su escuela.

También son inexplicables las imágenes y logotipos que asocian a las escuelas. Insisto, una escuela es algo serio y no puede ser que el logotipo sea la caricatura de un poeta chileno muerto recientemente o un grupo de niños deteniendo una llave porque la escuela (que no es sólo un jardín de niños) se llama Ignacio de la Llave. Una cosa es el kinder Blanca Nieves al que fueron mis primos hace treinta años cuando los jardines de niños no tenían siquiera que registrarse ante la SEP y otra estudiar en una secundaria o una preparatoria que claramente no se toma en serio a sí misma. ¿Se imaginan un certificado de preparatoria o un título de licenciatura que se entregue junto con un diploma con fulanitos o personajes de disney? Tristemente sospecho que nos falta muy poco.

lunes, 15 de febrero de 2010

digo

será porque no soy abogada pero hay discusiones que me parecen poco menos que bizantinas. ¿qué es eso de la intención del legislador? la idea de que para interpretar adecuadamente una ley debemos ser capaces de descubrir cuál era la intención inicial de quien la escribió no puede ser más que una quimera.

si muchas veces en realidad no estamos seguros ni de las propias intenciones, cómo prentendemos descubrir y defender lo que movía a un revolucionario empistolado encerrado durante dos meses en un teatro en querétaro [en el mejor de los casos] o a un diputado que vota no por convicción sino por obediencia o cálculo político [en el caso más probable]. ¿qué oráculo o máquina del tiempo se usa para conocer las intenciones de un individuo concreto? porque podría sugerirles algunos usos mucho más útiles como desentrañar los misterios de roswell o averiguar de una vez por todas qué pasó con muñoz rocha o quién mató a paco stanley.

incluso suponiendo que tuviéramos maneras indiscutibles de conocer la intención del legislador ¿qué importancia tiene si el contexto concreto al que respondía la ley no es ya el contexto actual? lo realmente importante no es qué entendía el revolucionario empistolado por derecho, igualdad o secularismo sino cómo se debe entender ahora, cuáles son sus implicaciones y sobre todo en dónde está el bien mayor.

este tipo de argumentos tienen a un dentista y a un vendedor de seguros decidiendo qué de la historia de estados unidos debe enseñarse y cómo debe hacerse (http://www.nytimes.com/2010/02/14/magazine/14texbooks-t.html?pagewanted=1) y de ahí a convertir el país en una teocracia militarizada hay un paso pequeñísimo.

domingo, 14 de febrero de 2010

hoy tocan avisos varios

  1. acabé ayer el suelo bajo sus pies y el mundo sigue girando, la única consecuencia fue el cólico renal que me atacó anoche y no se ha ido del todo
  2. sé que debo desde el miércoles el recuento cuantitativo, lo haré cuantiantes, lo prometo
  3. este blog llegó ayer a los 3 mil visitantes desde noviembre de 2008. como sé bien que en realidad casi todos son los mismos asiduos lectores/amigos se los agradezco desde el fondo de mi corazón

miércoles, 10 de febrero de 2010

de calcetines y otras cosas

¿Pueden unos calcetines hacerte sentir vulnerable? La respuesta es, sin duda. Tengo unos calcetines simplemente espantosos. Son del tono más feo imaginable de azul turquesa con grandes bolas (que al ponérmelos resultan más ovoides que circulares) blancas, naranjas y rosas. Son ofensivamente feos; nada combina con nada más y las bolas están repartidas de manera absolutamente arbitraria por lo que la ausencia de simetría o algún otro tipo de distribución armónica me desconcierta y me pone muy nerviosa.

Toda la semana pasada y hasta ayer no hubo agua en la casa porque cambiaron el tinaco de la azotea y eso significa que hoy en la mañana no tenía calcetines limpios, excepto los horrorosos calcetines azules. No quiero que me malinterpreten, son horribles pero les tengo cariño, me los regaló una tía madrileña que se especializa en dar regalos inverosímiles y decir "si esta niña es imbécil" si pretendes ponerle freno a su compulsión regaladora.

Pero volviendo al punto, cuando me vestí eran los únicos calcetines limpios por lo que no tuve más remedio que ponérmelos. Y todo el día, como cada vez que las circunstancias me obligan a usarlos, me he sentido vulnerable. Me da terror pensar que si por alguna razón insospechada me tengo que quitar las botas en público, me van a ver con mis calcetines horribles. Es más, siento que los calcetines y el hecho de que no quiero que me vean con ellos puestos pueden ser razón suficiente para que algo pase. Si a eso le sumamos esa cosa extraña que tengo atrapada al fondo del paladar y que he decidido llamar presentimiento llevo todo el día con una extraña inquietud.

viernes, 5 de febrero de 2010

Marcadores al 1 de febrero

Para facilitarme el conteo de los marcadores en este reto, hago aquí un recuento parcial al final del primer mes. Los primeros 31 días de los 79 que incluirá. ( El miércoles próximo, 10 de febrero, será justo la mitad del reto y haré un recuento cualitativo -tenía que ser profesora de investigación-).

jueves, 4 de febrero de 2010

addiction

the fact has to be acknowledged, and it has to be en english or it won't work

i'm sadly but helplessly addicted to cheap chick lit, and to make matter worse it includes crappy teenage chick lit

there, i said it
the worse part is that accepting it doesn't get me any closer to overcoming it.

martes, 2 de febrero de 2010

temblor

Acabo de sentir muy claramente un leve temblor y, la primera consecuencia, es que me delcaro incapaz de seguir leyendo el suelo bajo sus pies al menos por el momento. Desde el principio de la novela con el gran terremoto en Jalisco, la historia reslutla demasiado cercana. Después, en medio de los grandes terremotos y la desaparición de Villa Huracán, vino el terremoto de Haití y tuve que dejar el libro un par de semanas en lo que el terremoto podía retomar sus cualidades de situación literaria.

El fin de semana retomé la lectura pero con un miedo de fondo a enfrentarme a un terremoto real, justo como a Ormus Cama se me está borrando la forntera entre dos mundos distintos.

Tengo que confesarlo, quiero termirnar el suelo bajo sus pies pero me da miedo.

domingo, 31 de enero de 2010

sigo en tono confesional

Creo que a mis 32 por fin tengo claro quién quiero ser, y mucho más claro aún quién no quiero ser. Me gusta mi vida y lo que sé que puedo hacer con ella. Me gustan las posibilidades que se abren ante mí, me gusta saber que todavía puedo mandar todo a la fregada, dar el salto al vacío y empezar de nuevo en otro espacio. Pero también me gusta tener tiempo, no verme forzada a decidir sobre el salto hoy o mañana. Me gusta pensar que cuando sea el momento adecuado, el salto será definitivo. Me doy cuenta que ésta es una realidad muy poco común entre la gente de mi edad, en particular entre las mujeres de mi edad.

Sé que soy mucho más que una maestra de prepa, y que va siendo momento de vivir en consecuencia.

Llevo una semana de sumo optimismo, y lo más extraño es que el optimismo viene de la certeza de que ya decidí dejar de hacerme tonta y enfrentar mis propios monstruos. Da miedo pero me tranquiliza saber que varios están encantados con la oportunidad de compartir mi vértigo.

Creo que esta es la conclusión, el vértigo me hace sentir viva.

sábado, 30 de enero de 2010

magnanimiedad

No sabría decir porqué pero hoy la vida me parece encantadora. No es necesario conocerme demasiado ni ser un lector asiduo de este blog para saber que le tengo muy poca paciencia a los tontos, y desde la mañana me he enfrentado a estupidez tras estupidez. En situaciones normales habría pasado gran parte del día de pésimo humor. Afortunadamente no es así, hoy estoy de un humor particularmente magnánimo y la estupidez no me da coraje, sólo ternurita.

jueves, 28 de enero de 2010

670 horas y media

Hace poco una compañera de trabajo dijo que enero siempre le ha parecido un mes larguísimo. Hoy tengo que concordar con ella. Por un lado, 2010 sigue siendo tan joven que al escribirlo, todavía se siente raro que no lleve dos ceros seguidos. Pero por el otro, diciembre y las vacaciones parecen muy lejanos.

Siento que los 28 días que han pasado son algo así como una ola formándose y creciendo y que el primero de febrero es el momento en que la ola reventará, y el resto del año se convertirá en un torbellino de espuma, sal y arena que nos arrojará en la playa de 2011 antes de que podamos reaccionar o hacer algo al respecto.

Han pasado 670 horas en el año y en este momento me parece una eternidad, pero respiren hondo, tomen aire que ya se va a acabar enero y ya verán como el resto del año nos parece nada, así es esto (y si se lo preguntan, a partir de este momento -28 de enero, 10:30 pm- al año le queda 8089 horas y media).

martes, 26 de enero de 2010

hoy

Hoy quiero jugar a pensar que ha sido un día central en mi vida,
un día que dividirá dos etapas.

Parte de mí me dice ¿qué posibilidades hay de que sea así,
de que no sea simplemente un martes más?
Pero otra parte me dice que, aunque las posibilidades sean pocas, están ahí;
que, eventualmente, tendré que vivir un día que señale el principio de una época,
y que ese día perfectamente puede ser hoy.

lunes, 25 de enero de 2010

to tweet or not to tweet

hace algunos meses descubrí con sorpresa la seria discusión que se ha tenido en estados unidos sobre el uso de las redes sociales (fb, twt...) en clases y como herramienta de comunicación entre profesores y alumnos. algunas escuelas prohiben absolutamente cualquier posiblidad de comunicación personal entre profesores y alumnos por temor a contactos inapropiados. yo la verdad nunca me había planteado la posibilidad de hacer mal uso de estas herramientas de comunicación. quizá el único dilema en que me encontré fue el famoso episodio de los estúpidos con papeles y la calculadora científica ¿debería decirle a alguien lo que estaban haciendo los chavos en clase? ¿las fotos y videos que se ponen en facebook son información pública? ¿se está violando algún tipo de confidencialidad al mostrarlos en otro contexto?

por regla general acepto todos los friend requests de fb de mis alumnos pero yo nunca les envío solicitud. la discusión que menciono al principio de esta entrada la descubrí el día que me empezó a seguir en twitter el primer alumno. ¿quería también darles acceso a esa parte de mí? llegué a la respuesta muy pronto: si quería mantener mi twitter público tendría que asumir que mis alumnos serían parte de ese público. de cualquier modo nunca he publicado algo que no diría en clase (creo).

ahora toca dar el siguiente paso, mis alumnos empiezan a twittear o por lo menos a abrir cuentas en twitter y yo soy uno de sus referentes obligados, una de las pocas personas que conocen personalmente y usa twitter de manera habitual. ya los animé a unirse a twitter, ya me siguen ahora necesito encontrar maneras más creativas de integrarlo al trabajo en clase más allá que recados puntuales y dudas sobre tareas.

¿sugerencias?

sábado, 23 de enero de 2010

La Nao de China

Alguna vez dije que en México ya sabíamos multiplicar aunque nos faltaba aprender a dividir. Hoy todo parece indicar que ya no sabemos ni sumar. Nos empeñamos en restar y dividir cuando necesitamos sumar: Sumar voluntades, sumar ideas, sumar compromisos. Tenemos que ser incluyentes, abrirnos a la diversidad, al auténtico amor; rescatar lo humano más allá de las aparentes diferencias.

viernes, 22 de enero de 2010

un buen día

hay días, y en particular días como hoy en que me encanta mi trabajo. el proyecto internacional está muy cerca y por primera vez que las cosas avanzan. es increíble la diferencia que representa una planeación adecuada y rigurosa.

los directores parecen estar montados en el proyecto y los profesores están en la mejor disposición, hasta hace que mi realidad intermitente de chofer de ADO valga la pena.

y hablando de rigor, he decidido que adiós mundo cruel de ariel rot con jaime urrutia es la canción del mes de enero y no por el título sino por aquello de "el rigor, corazón, es muy difícil"

miércoles, 20 de enero de 2010

libros

En mi cuarto tengo dos libreros idénticos, bueno en realidad son dos juegos de 6 repisas puestos entre la bay window que era la ilusión de mi madre desde que construyeron la casa— y las paredes. Desde que pusieron las repisas dividí cuidadosamente su contenido, del lado izquierdo están los libros de literatura y del derecho los de teoría: filosofía, antropología, historia y teoría literaria.

Como cualquier persona que me conozca o que lea este blog debe saber ya, no soy una persona particularmente ordenada y hacer algo al respecto, en particular en mi cuarto, es el propósito que más rompo: no sólo a principio de año sino cada fin de semana. Siempre que decido ordenar empiezo por los libros y, específicamente, por el librero de la izquierda. Esto ha ocasionado que en este momento todos mis diccionarios y libros de literatura están perfectamente ordenados. En cambio, el librero de la derecha es un verdadero desastre, todos los libros están inclinados entre 20 y 60 grados, hay muchos fuera de sitio y muchos espacios vacíos.

Creo que el estado actual de mis libreros es un reflejo de mi situación intelectual real: Estoy leyendo, menos de lo que quisiera, ya sabemos que durante el periodo académico de mis alumnitos leo poco; estoy escribiendo, quizá menos de lo que podría pero mucho más de lo que habría creído posible hace tres meses; pero estoy muy lejos del mundo académico más allá del KB y mis cursos de filosofía para preparatorianos.

lunes, 18 de enero de 2010

una confesional


Hoy quiero matizar un poco. La crisis anunciada el sábado en la noche no es tan grave en el sentido en que no supone tomar decisiones precipitadas sobre mi vida en los próximos días. Tiene que ver más bien con bajar la barrera de la evasión, empezar a ver hacia adentro y hacia adelante y abrirme a un auténtico discernimiento que me permita tomar las decisiones que he evitado por miedo o por comodidad.

Hace rato A.L. lo dijo con toda exactitud: "llega un momento en que no puedes ser tú sin lastimar" y creo que es un paso más del proceso de crecimiento. Este ser tú parte de tu interioridad y de convicciones más profundas que una simple pretensión de originalidad - reconocimiento.

Y hablando de originalidad, ahora resulta que uno no puede ser original ni en las crisis. Hace algunos días me encontré este texto -está en inglés- que me dio mucho coraje por dar completamente en al clavo no sólo conmigo sino con gran parte de las personas que me rodean, pero también por la sobresimplificación. Sí, todos estamos pasando o saliendo de crisis del cuarto de vida pero estas crisis se complican con situaciones profundamente personales en cada uno. Esta neurosis occidental-aristótelica por clasificar y analizar todo, por disecarlo y descomponerlo deja a un lado la profunda complejidad del ser humano. Y además parece condenarnos permanentemente a la angustia y la infelicidad: pasamos de la adolescencia a la crisis del cuarto de vida, a la aceptación de la propia condición de adulto a la crisis de media vida y de ahí a la menopausia y el insen. Otra vez la terrible condena de tener barros y arrugas al mismo tiempo. ¿Qué no habrá otra manera de estar en este mundo que dejando el alma embarrada en el pavimiento?

miedos y amenzas

Nací a finales de los setentas (en 1977 para ser exactos) y fui al kinder y a la primaria en los ochentas: entré al kinder en septiembre de 1980 y terminé la primaria en junio de 1990. Acabo de caer en la cuenta que pertenezco a una de las pocas generaciones en la historia de México que creció sin levantamientos armados, grupos guerrilleros y problemas políticos mayores en el país.

En el mundo en que crecí la amenaza venía de fuera, en mi caso eran los comunistas que eran mucho peores que el coco, querían invadir nuestro país y prohibirnos creer en Dios y en la Virgen de Guadalupe. Todos los jueves se reunía mi mamá con un grupo de señoras y los hijos de todas a rezar el Rosario con la jaculatoria: "Virgen Santísima de Guadalupe, líbranos del Comunismo. Virgen Santísima de Guadalupe, defiende y salva a tus niños mexicanos". Me obsesionaba la idea de que llegaran los comunistas y decidieran dividir Puebla como habían dividido Berlín. Si la línea divisoria era la 16 de Septiembre mis abuelos iban a quedar de un lado y nosotros del otro. Pasé horas y horas analizando lo que conocía entonces de la ciudad para tratar de prever en dónde quedaría la línea y qué pasaría con nosotros entonces. Otro de mis enormes temores era que fueran encontrar vestigios arqueológicos o petróleo en el jardín -de 3 por 3 metros, no exagero- de mi casa y que el gobierno nos la expropiara.

Los levantamientos armados eran cosas que pasaban muy lejos y que no tenían nada que ver conmigo. El concepto de lucha social era mi mamá dando de gritos con otras mujeres de la Cívica Femenina (de donde salió Ana Tere) afuera de Casa Puebla reclamando sobre algún chanchullo en las elecciones locales. Las guerrillas existían en Eco y 24 horas (yo era ávida espectadora de noticias desde entonces) y en los libros de texto.

El único momento en que una guerrilla se presentó en mi infancia fue en sueños y esa pesadilla la recuerdo hasta ahora: Estaba en el cine con mis papás y mis hermanos y había un bombazo. En medio del caos y los gritos de heridos me enteraba que eramos rehenes de un grupo terrorista que se llamaba Camino Iluminado para la liberación de Zacatecas.

domingo, 17 de enero de 2010

un anuncio y ya


(que no una noticia informativa)

siento que viene. se acerca el momento de sentarme conmigo misma y empezar a ponerle nombre a las cosas. hoy leí una posibilidad que no me gustó (hablaré de ella en otro post en los próximos días). lo indudable es que, aunque me gusta mi vida por el momento, no quiero seguir viviendo así dentro de cinco años.

tengo miedo porque sé lo que pasa conmigo cada vez que decido replantearme las cosas. sigue un salto al vació y cada salto tiene la posibilidad de no caer bien. el problema no sería caer en un lugar distinto al previsto pues esto es lo que me suele pasar. las caídas son peligrosas por mucho más que el vértigo.

va siendo momento de incomodarme un poco y de renunciar a ciertas seguridades que amenazan con atraparme. ya veremos qué pasa conmigo.

jueves, 14 de enero de 2010

autorredescubrimiento

Si me hubieran preguntado hoy en la tarde a qué le tengo fobia mi respuesta hubiera sido "a los ratones". Si me lo preguntan ahora es "a las alturas... y un poco a los ratones".

La única vez que había experimentado este miedo con tal claridad fue hace como veinte años. Un día que quise cambiar por arriba de un muro de cinco metros de altura y más de un metro de ancho. Salí muy decidida pero a los dos pasos cometí el grave error de ver hacia abajo. Las rodillas me empezaron a temblar tanto que me tuve que sentar ahí. Después de un buen rato logré gatear los dos metros que me separaban de la parte sólida del edificio.

Casi no me acordaba de esa experiencia, pero hace rato regresó a mí con absoluta claridad. Mi papá sigue bastante mal de la rodilla así que decidí cambiar el foco de su recámara antes de que llegara y se le ocurriera subirse a la escalerita o hacer algún otro esfuerzo extraordinario de esos que decide indispensables cuando se supone que está en reposo. Mi mamá me ayudó a poner la escalerita y a subirme. Siempre que uso la escalera me siento en la parte alta o me quedo parada en el tercer escalón del arriba para abajo, pero el cuarto de mis papás es tan alto que tuve que subir un escalón más. Cuando quise estirarme las rodillas me empezaron a temblar incontrolablemente. Intenté estirarme tres veces más pero todas temblaba tanto que mi mamá, que estaba deteniendo la escalera, no lo podía creer. Acabé por rendirme y mover todos los muebles antiguos del cuarto para permitirme alcanzar el foco sin tener que pararme tan arriba en la escalera.

Es absurdo, lo sé, y me dio muchísima risa, pero así son las fobias, completamente absurdas. Temblar incontrolablemente a 1.5 metros del piso y con una cama junto, para amortiguar la caída como en las caricaturas.

Lo más extraño de la historia es que las alturas me encantan, amo los edificios altos y creo que la azoteas deberían ser usadas para más que tender la ropa y poner el tinaco. Me encanta conocer las azoteas de las casas, me encanta subirme a la de mi casa a ver pasar la vida desde con una perspectiva diferente.

miércoles, 13 de enero de 2010

de popularidades y odios

Hace mucho tiempo que digo que dar clase no es un concurso de popularidad. Si como profesor haces las cosas para que los alumnos te quieran o no te dejen de querer estás en serios problemas. La gente es muy hábil para detectar que esperan los otros y para darles por su lado. Los grupos de adolescentes en particular reconocen de inmediato las motivaciones de sus profesores y las suelen usar en su provecho. El profesor que busca que los alumnos lo quieran genera un juego del que él mismo es la víctima. Los alumnos se aprovechan de su fragilidad y lo manipulan. Se dedican a darle por su lado, a hacerle la barba y a evitar a toda costa trabajar seriamente.

Yo estoy plenamente reconciliada con la idea de tener una personalidad polarizadora. No sé si ha sido parte de mí siempre o si es algo que he desarrollado en los últimos años, lo que sí me queda muy claro es que logro causar reacciones fuertes en la gente. Y sí, hay mucha gente a la que le caigo mal, creo que ya he escrito del tema y no es algo que me quite el sueño. Pero muchas veces la reacción va mucho más allá de un simple caer mal y algunos realmente me odian.

Hoy me enteré que a alguno de mis alumnitos del semestre pasado le caigo verdaderamente mal y desde que lo supe estoy verdaderamente intrigada, me urge averiguar quién es. Y no es por un afán de revancha o algo por estilo, es más bien por morbo. ¿Ya les había dicho que el odio me parece halagador?

Hay cosas que realmente no entiendo

Hoy pensaba hablar de lo miserable que fue mi día con el frío espantoso que no se me quitaba con nada. Y que tiembla en Haití.

Sí, en Haití el país más pobre de América, el mismo que sufrió cuatro huracanes en dos semanas en 2008. Un país que tiene un índice de analfabetismo de casi 50%, 80% de la población está por debajo de la línea de la pobreza y más de 35% en pobreza extrema. Un país que ha demostrado una y otra vez que el sistema no lo necesita. Un país en el que se mezclan la miseria, la enfermedad y la desigualdad.

Hoy en Haití se registró el terremoto más fuerte del Caribe en muchos, muchos años (se dice, incluso, que el terremoto más fuerte que se ha registrado en el Caribe, punto). Sabemos por haberlo visto una y otra vez que los terremotos (o cualquier otra catástrofe natural, para el caso) combinan muy mal con la pobreza aunque parecen atraerse unos y la otra de manera inexorable. Sabemos que mañana amanecerá sobre un Haití devastado y que no podemos hacer más que esperar a que amanezca para empezar a conocer las dimensiones de la tragedia.

¿Por qué Haití? En serio, no tiene ningún sentido. Un terremoto era lo único que les faltaba y que les llega uno de ligas mayores.

lunes, 11 de enero de 2010

por qué escribo, continuación


Empecé a publicar todos los días como una forma de obligarme a mí misma a escribir. También quería saber si sería capaz de la disciplina necesaria para darme el espacio de hacerlo diariamente.

El proceso lo disfruté tanto que ya entré en el segundo mes aunque con unas reglas un poco más relajadas. Espero publicar mucho más de las treinta entradas acordadas en las reglas, tengo un número en la cabeza pero no lo quiero decir para no presionar a nadie ni echarme la soga al cuello. Al final del reto les compartiré cómo quedé en la meta personal.

En el camino he descubierto un enorme beneficio adicional, y tiene que ver con no dejar que la distancia gane (el número 6). Mi blog se ha convertido en una manera de mantenerme cerca de quienes están lejos que en mi vida son muchos y cada día más. Es el espacio de intimidad compartida del que escribía hace un mes. Dicen que cuando se escribe se tiene en la cabeza a un lector ideal. Pues todos ellos son mis lectores ideales, escribo para mí pero también escribo para ellos. Y lo mejor de la historia es que me leen en realidad y que para ellos este blog es transparente, no necesitan claves ni pistas para descifrar no sólo lo que digo sino lo que dejo de decir.

domingo, 10 de enero de 2010

juegos de mesa


Me encantan los juegos de mesa. Últimamente no los he jugado con suficiente frecuencia pero esto es una simple señal del estado actual de mi vida, no es nada general. El primer juego de mesa que recuerdo jugar hasta el cansancio es el Sorry! y tiene una historia muy particular.

Mi abuelo paterno era español y uno de sus hermanos migró a Nueva York, nunca conocí al tío D. pero sí a su esposa una polaco-americana, tía P. y a algunos de sus hijos y a un nieto. La tía P. vino a visitar a la familia en algún momento alrededor de 1984-1985. Regresó a Estados Unidos y envío una caja con regalos. Había algo para cada uno de los primos y un juego de mesa por familia. A mí, como al resto de las primas me tocó una joya ochentera: una bolsa Jordache que tenía adentro un monedero con una moneda de dólar.




En la casa nos tocó el Sorry! Durante algunos meses no los pudimos jugar porque las instrucciones y las cartas estaban en inglés y nadie de mi familia hablaba suficiente inglés para poder entenderlo y traducirlo. Esta situación se remedió (de forma muy particular como se verá más adelante) con la visita de un primo de Veracruz a quien no nombraré siquiera por inicial para no ventanearlo. El primo en cuestión aseguraba hablar inglés así que se sentó, leyó las instrucciones y me las explicó. El resultado: mis hermanos y yo jugamos Sorry con unas reglas complicadísimas y muy poco apegadas a las reales hasta que mi hermana y yo regresamos de Escocia y pudimos leerlas y reírnos del tarado primo que nos había estado jugando absurdamente durante unos cinco años.




Una vez que aprendimos a jugarlo adecuadamente empezamos a jugarlo a la menor provocación y estoy llegó a su punto máximo cuando acabábamos de entrar a la universidad que dos amigos pasaban por la casa por lo menos dos veces a la semana a jugar un Sorry! y se iban corriendo a seguir con sus ocupaciones.

Últimamente he extrañado esos tiempos en que me hacía tiempo en medio del caos para sentarme 45 minutos a jugar. Yo creo que eso me llevó a comprar un Sequence el sábado en la noche, por eso me pareció maravilloso que A. pasara por aquí hace rato, me propusiera jugar una partida y que después cada uno volviera a lo suyo.